Eleanora Fagan: To Billie With Love From Dee Dee (Dee Dee Bridgewater) Un homenaje a Billie Holiday no es una novedad. Reinterpretarla, remixarla (una moda que no respeta a nadie) o reversionarla tampoco es un hecho para destacar. Y no parece ser esa la intención de DeeDee Bridgewater en el ampuloso y kilométrico título “Eleanora Fagan…”, mas bien, el título suena como el destinatario a quien se le envía un regalo; un regalo de gran calidad para mostrar la gratitud de una grande para una gigante.
Hacer un disco homenaje o un tributo es algo que, desde la perspectiva de la composición, parece sencillo: los temas ya están ahí o fueron inmortalizados por un intérprete; hay que tomarlos y volver a interpretarlos. En esa situación se asume el riesgo muy desagradable de la comparación; situación de la que no son muchos los que salen ganando. Conociendo esas reglas, Dee Dee tomó un camino mas arriesgado: interpretó con su particular estilo algunos de los temas que solía interpretar Billie dejando bien en claro que la idea era construir un regalo, mas que una estatua de bronce musical. Y, a la vista de los resultados, la opción elegida fue la correcta. Acompañada por una banda que deja verde de envidia a mas de una cantante, James Carter (flauta, clarinete y saxos) Edsel Gomez (piano, arreglos) Christian McBride (contrabajo) y Lewis Nash (batería), Dee Dee hace una exposición de talento, creatividad, buen gusto y humor (en sentido amplio de la palabra; aplica perfectamente el estado de ánimo adecuado a cada tema) para obsequiar tanto a Billie como a los oyentes con una visión propia de una serie de standards que eran el repertorio estable de la gigante Billie (“All of Me”, “Lover Man”, “You’ve Changed”, “Good Morning Heartache”) mas un par de títulos propios de la obsequiada (“Lady Sing the Blues”, “Fine and Mellow”). En una muestra de solidez interpretativa, voz y banda se mueven con una soltura, naturalidad y facilidad que da la impresión que vienen tocando juntos desde toda la vida; hecho particularmente notable cuando se meten en las baladas (que están a un paso de ser blues jazzeados o jazz bluseados) y que son el plato fuerte del disco; un disco muy parejo que se entiende como tarea de equipo, donde no hay una figura principal (salvo el natural protagonismo de DeeDee que pone su voz) sino que hay una banda de músicos grandiosos (cada uno de ellos con la misma “importancia” que la voz femenina) que trabajan en conjunto para lograr interpretaciones únicas, impecables.
Billie y los oyentes agradecidos por el regalo; una música fantástica magistralmente interpretada con el estilo propio es, tal vez, mucho mejor tributo u homenaje que el mero intento de imitación de alguien que fue, es y será inimitable e inigualable. Apto para todo público, es un gran regalo para las madres bluseras y jazzeras (si lo consigue… Vamos, muévase, la vieja merece un regalo de esta categoría)…
Alberto “Tano” Rosso
DeeDee Bridgewater "Don't Explain"
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